Drogodependencia. Módulo 2.

Resumen

Sin la concepción de interdisciplina, no se puede tratar la adicción. Consideraremos cuál es el perfil del adicto, del adicto y su familia, del adicto y su grupo, de los adolescentes adictos, de los adultos adictos y aun de los pertenecientes a la tercera edad que, aunque no lo sean estrictamente, también abusan en muchos casos de determinadas sustancias.

En general, cuando un paciente concurre a un consultorio, no viene solo, lo hace acompañado por su familia o derivado por el juez o por miembros del gabinete psicopedagógico del colegio. Corrientemente, la demanda o el pedido de tratamiento no parte de él, sino de la familia o del juzgado. Antes se decía que cuando no venían al consultorio por demanda propia, el pronóstico era reservado, porque si alguien no pide ayuda para sí, difícilmente se lo pueda ayudar. La experiencia de muchos años me ha indicado que no es así, porque frecuentemente exigen a partir de los otros, es decir, no piden por su propia ayuda y esto es una de las cuestiones básicas de la adicción.

"Adicción" significa, etimológicamente, sin palabras, porque el adicto es aquel que no puede decir qué le pasa y, por lo tanto, actúa drogándose o alcoholizándose. Cuando empleo estos dos últimos términos, no me refiero única y específicamente a la relación que el adicto tenga con la sustancia, porque allí no termina de desarrollarse la actitud adictiva.