Histeroscopia. Estudio directo de la patología endometrial. Nuestra experiencia.

Resumen

La indicación primaria de la histeroscopia es la evaluación de pacientes con metrorragia. Esto no ha cambiado desde que Pantaleoni realizó la primera histeroscopia en 1896.
La metrorragia es uno de los problemas clínicos más frecuentes que enfrenta el ginecólogo. Históricamente, se ha empleado el raspado uterino para diagnóstico y, en algunos casos, como tratamiento sintomático de la metrorragia. Se ha observado que algunas pacientes no se benefician con este tratamiento, entonces se recurre a la histerectomía como alternativa. En los Estados Unidos, se realizan más de 600.000 por año, de las cuales entre el 25 y el 50% son por metrorragia en pacientes ovuladoras, y en ausencia de otra enfermedad ginecológica.
El raspado de la cavidad uterina a ciegas raramente ofrece beneficios terapéuticos a largo plazo. Algunos autores han resaltado que el raspado no es un método muy apto para evaluar la cavidad endometrial.
La histeroscopia nació como una técnica o procedimiento de diagnóstico, posteriormente empleada para el tratamiento de metrorragias mediante la ablación o resección del endometrio, biopsias dirigidas, extirpación de pólipos o miomas submucosos.